Novedades

Cuando Meredith aceptó ayudar a su pupila, Belinda, dejando una nota para Ryan Crawford en su dormitorio, lo último que esperaba era que Frederick Wharton la pillase in fraganti. Un barón intransigente e insensible, un relojero escocés, una joven soñadora, dos hermanas muy locuaces, una madre soltera, un acérrimo enemigo de las institutrices y una joven de pelo rojo con mucho carácter e institutriz, para más señas…

La Toscana, Montepulciano 1885 El joven seminarista Orazio Cipriani atraviesa una profunda crisis espiritual. Incapaz de resolver el dilema que lo atormenta, es enviado por su director espiritual a visitar al padre Mariano, un anciano que guarda más que consejos en su interior. Lo que Orazio no espera es que, en lugar de una respuesta directa, recibirá una historia. Una historia ajena, antigua y, sin embargo, inquietantemente cercana.1813 Francesco Marchetti, hijo del alfarero del pueblo, es un joven humilde, devoto y obediente, cuya vida toma un rumbo inesperado cuando es forzado a ...

Fernando Guerra Cañamar, un alma marcada, que vio su infancia desgarrada por la cruel separación de sus padres. En su adolescencia, fue obligado a participar en un secuestro, reviviendo así la dolorosa separación que sufrió años atrás. Por este giro del destino se reencuentra con su familia. Fernando, ahora capitán de los dragones, se siente desolado cuando la mujer, a la que jura amor, lo rechaza por convencionalismos de la época. Marcado por la desilusión de un amor fallido, recibe una petición insólita. Antes de exhalar su último aliento, el general de los Dragones, Agustín...

En el Valle de San Nicolás de la Capellanía, los Flores de Abrego, y los Guerra-Cañamar, celebraban con júbilo la llegada de Anastasia Lucia Catarina y Josefa Estefanía Ignacia, dos hermosos ángeles que alegraron la vida de Doña Rosario y Don Joaquín, quienes sufrieron lo indecible cuando una tribu de apaches secuestró a su primogénito, para nunca más verlo. Marcos Ignacio y su hermano Francisco Xavier, hijos Don Francisco Ignacio y Doña Andrea Flores de Abrego, padrinos de las gemelas, adoraron a las pequeñas nada más verlas, a tal punto que, desde su bautizo, crecieron bajo ...

Ella solo quería encontrar a su amor verdadero, pero lo único que consiguió fue enamorarse de un hombre que estaba fuera de su alcance. Como casamentera, Jane Braxton cree en el amor y en las almas gemelas, si bien como bastarda sabe que nunca podrá aspirar a un matrimonio con alguien de alta cuna. Pero tras años de ver como sus amigas se casan y de esperar al hombre perfecto, una noche sucumbe a la pasión y se entrega a un desconocido. Solo que, a la mañana siguiente descubre que él es marqués, y ella desaparece sin dejar rastro. Como Marqués de Bedford, Mark no sabe nada del ...

Phemie Sinclair es la señorita perfecta, la hija ejemplar que jamás ha protagonizado un escándalo, una joven apacible que siempre ha seguido las reglas y ha soñado con una vida de recogimiento junto a las monjas agustinas. Su fe en Dios es inquebrantable y su corazón anhela una existencia de paz y devoción. Sin embargo, cuando finalmente su familia accede a su deseo y le permite partir hacia la abadía, se embarcará en un viaje transformador, lleno de aventuras y peligros.

Charlotte Murray carga con una cicatriz que ha dejado secuelas tanto físicas como emocionales. No está dispuesta a volver a sufrir por comentarios, miradas condescendientes ni burlas despiadadas... Y si para conseguirlo debe morir siendo una solterona, ¡que así sea! Una sola variable no estaba contemplada en sus planes de eterna soltería: conocer a un libertino danés que pusiera su vida de cabeza. Wilhelm Battenberg es la clase de hombre que las matronas recomiendan tener lejos. Apuesto, carismático, rico... demasiado irresistible. Podría hacer trizas la reputación de una dama con ...

Heida llega a Londres dispuesta a encontrar el amor. Por más que se esfuerza ningún caballero le hace sentir nada, hasta que el destino le pone delante al último pretendiente que ella habría imaginado. El duque de Harmont lleva tres temporadas buscando esposa, su madre le ha dado una lista con las mejores damas de la temporada, todas le transmiten lo mismo, nada. La duquesa viuda no deja de presionarlo para que elija, pero él no pierde la esperanza de encontrar a una dama capaz de acelerar su corazón. Por un error se encuentra con Heida, que altera todos sus sentidos. Será ese mismo ...

Tras la amenaza de su padre, el actual conde de Surrey, Edward Blackwood decide buscar esposa. Blackwood nunca ha creído en el amor, así que cuando descubre que la hija de un barón ha sido repudiada y su dote se ha doblado dos veces, no duda en pedir su mano. Todo iba bien hasta que un mes antes de la boda lady Alice, su prometida, desaparece dejándolo con serios problemas. Si no aparece, deberá llevar a cabo la ardua tarea de encontrar una nueva prometida y casarse en menos de un mes. Elizabeth acaba de perder a su hermana, está triste y enfadada, y el hombre más atractivo que ha ...

Lord Leopold Ferdinand Audley VII era un redomado libertino. Dedicaba su vida a sus únicas dos pasiones: las mujeres experimentadas y los caballos. No tenía tiempo para veladas, ni tés, ni paseos en el Hyde Park… Las damiselas debutantes no presentaban ningún atractivo para él. Mucho menos esa… ¡La señorita Greta Lanford! Greta representaba lo que Leopold más temía. Buena reputación, inocencia y matrimonio. Pero con lo que el famoso Casanova no contaba era con que esa damita que apenas le llegaba a la mitad del pecho tuviera un ímpetu que competía con el suyo, una pasión ...

Ophelia Regan y sus amigas habían hecho un pacto para escapar de la tragedia shakesperiana a la que sus nombres las condenaban. Tarea que no parecía demasiado complicada, al fin de cuentas, era bella, joven, adinerada y sana. ¿Qué podía interponerse en su camino hacia la felicidad? Tal vez que su díscolo hermano prendiera fuego un granero... Y que este granero perteneciera a su vecino, el conde. Y que dicho hombre fuera famoso por la tiranía con la que regía sus tierras. Lord Han Gleeson no tenía tiempo para niñerías, sobre su cabeza pendía la espada de Damocles y nada le ...

Londres está convulsionada, una figura mítica, una bruja llamada Medea, se dedica a develar los secretos mejor guardados de la alta sociedad. Algunos la aman porque los ha salvado de la desgracia; otros la odian porque los ha puesto en la mira, y unos pocos... la quieren muerta. En este entresijo, existe alguien más, un hombre en particular que no la quiere ni viva ni muerta, le basta con tenerla lejos. ¿Por qué el maldito destino se empeña en cruzar sus caminos? Luke Callaghan es un mero guardaespaldas, un hombre cuyo trabajo es la violencia. Emplearla o evitarla, según quien le ...

Una deliciosa y sensual novela en el París más bohemio del siglo XIX. Erotismo, arte, sensualidad y romanticismo en un entorno mágico. ¿Te gustan los viajes y las aventuras? ¿Y viajar al pasado, concretamente a Londres y París? Un homenaje al arte, al amor y la libertad. Sorpréndete con el moderno XIX parisino (novela documentada históricamente, con bibliografía añadida como curiosidad). Siglo XIX. Amy escapa de Londres el día antes de su boda concertada, que la hubiese llevado a un destino muy cómodo, pero con un hombre al que detesta. El viaje hacia su libertad no será fácil...

Un gato en peligro. Una muchacha de carácter salvaje, más que el animal en cuestión, y un hombre tan rígido como una estatua. ¿Qué podría salir mal? ¡Todo! Si de parejas opuestas se tratara, la señorita Meribeth Bell y el señor Huge Leslie eran los máximos exponentes. Ni la casamentera más osada hubiera predicho esa unión. Ella era norte, él era sur. Noche y día. Verano e invierno... Pero, contra todos los pronósticos, el destino pensaba diferente. Una serie de eventos (des)afortunados y ¡Zas!... ¡Los declaro marido y mujer!

Una subasta, un cuadro, una tormenta y amigos casamenteros... ¿Qué podía salir mal? La señorita Webster parecía condenada a la soltería, con un primo que no le exigía nada más que ser feliz e independiente, no tenía motivos para buscar un marido. Sus obras de arte, sus sobrinos y amigas le bastaban. El señor Callum, heredero impensado de la fortuna familiar, planificaba su vida con la misma meticulosidad que sus negocios. El siguiente paso era casarse con una muchacha noble que le quitara el estigma de plebeyo. Juntos retaban al destino, pero... el destino no tendría la fama que ...

—En la salud y en la enfermedad, ¿recuerdas? —Hasta que la muerte nos separe —completó él—. No pienso morirme pronto, Cordelia, aún tengo que hacer que te arrepientas de este matrimonio. Winston Learcastle, el gran magnate de los negocios, disfruta de jugar con la gente como si fueran sus marionetas. No hace distinción. Empleados, lores, empresarios… hijas. Todos deben someterse a sus mandatos y quien se atreva a desafiarlo lidiará con las consecuencias. Cordelia Learcastle lo sabe bien, pero hay un asunto con el que es intransigente, su amor hacia Morris Fitzroy. Un amor ...

Si algo ha aprendido Juliet Leslie de su familia es a romper las reglas. Su hermano y su tía hallaron la felicidad luego del escándalo y ella no ve la hora de seguir sus pasos. Juliet no busca un Romeo que la lleve a la tragedia, prefiere un hombre que se salte las normas por ella. Lord Roman Clapton no es ese hombre. Él ya estuvo en el epicentro de las habladurías y no desea volver allí. Lo único que ansía es vengarse del culpable y regresar a su refugio lejos de Londres. Pero Juliet se cruza en su camino y entonces descubrirá lo que jamás creyó posible: una muchacha rebelde y un...

Roderick Clayton Penword lo dejó todo para huir de un padre al que considera tirano, y de una mujer que lo traicionó al casarse con otro. Ha jurado no volver a Inglaterra y construir una vida diferente en otro lugar, pero el destino le tiene reservada una gran sorpresa. Cruzando las Azores con rumbo a Nueva York, rescatará de unos piratas portugueses a una mujer única, inteligente, y que conoce desde niña. Roderick nunca habría imaginado que hallaría su verdadero lugar entre los brazos de una muchacha de férreo control, y hermosos ojos celestes.